Si Magic Johnson fue un gran líder dentro del campo, también dominaba el arte del pase decisivo fuera. Gran organizador de fiestas en Los Ángeles, su casa fue incluso comparada con el paraíso por sus compañeros de los Lakers… Evidentemente, todo esto ya no sería aceptado en estos días.
Si Michael Jordan Si no existiera, Magic Johnson podría ser el jugador de la NBA más popular de todos los tiempos. Al llegar a una liga enferma, el líder logró recuperar el interés por este deporte y hacer de Los Ángeles LA ciudad más atractiva de Estados Unidos. Más que su talento, fue su carisma y su sonrisa lo que cautivó al público.
Además, si Jordan tiene más de un enemigo entre los jugadores de la época, Magic Johnson parece ser unánime entre las leyendas, prueba de que tenía algo más. Ese algo podría ser su amor por las fiestas y las grandes fiestas que organizaba para sus compañeros de equipo, sus oponentes y todas las superestrellas de Hollywood. Y ojo, que no estamos hablando de pequeños cócteles sociales como hay tantos otros.
Las locas fiestas de Magic Johnson en Los Ángeles
Si la palabra orgía tuviera que tener una representación visual, sin duda sería la casa de Magic Johnson en los años 80, donde todos los vicios eran aceptados. En su libro que recorre la historia de la dinastía de los Lakers de Showtime, Jeff Pearlman explica detalladamente el desarrollo de estas veladas íntimas, en las que el líder y sus amigos no se privaban de nada.
Varios Lakers afirman que las mujeres más bellas del planeta estaban en Magic Johnson. Había modelos, actrices, bailarinas. No había nada más prestigioso que una invitación a Magic Johnson. Y aunque a los jugadores de la NBA todavía se les permitía entrar, las mujeres aún tenían que cumplir tres criterios. Ya tenían que ser hermosos. Luego, tuvieron que venir desnudos.
Finalmente, tuvieron que aceptar hacer cosas con los jugadores de la NBA. En aquellas veladas, Magic Johnson se veía a sí mismo como un maestro. Un compañero de equipo de los Lakers dijo, por ejemplo: «Si muero y voy al cielo, quiero que el cielo se sienta como la casa de Magic Johnson durante sus fiestas». A medianoche en punto, los invitados tenían que empezar a hacer sus necesidades o los echarían. Luego Magic recorría las habitaciones para asegurarse de que todo estuviera bien.
Si sus compañeros compararon sus veladas en el paraíso es porque Magic Johnson tuvo que pensar en grande y hacerlo en grande. Tenía una lista completa de reglas que estas mujeres debían seguir, como vestirse de manera ligera y estar preparada para salir con jugadores de la NBA. Basta decir que estos métodos ya no serían necesariamente válidos en el contexto actual, y eso no es necesariamente peor…
Pasada la medianoche, hablar o bailar estaba fuera de discusión, los compañeros de Magic Johnson tuvieron que ofrecerse un momento de intimidad con uno de los invitados, a riesgo de ser despedidos. Las asistencias las conoce incluso fuera del campo.