Casi 3 meses después de su solicitud de intercambio, Damian Lillard aterrizó con los Bucks. El dirigente finalmente consiguió lo que quería, por culpa de una decisión polémica entre los Blazers. La competidora que es Dame no lo apreció en absoluto según la última información de una fuente…

A pesar de una rica carrera con los Blazers, el divorcio de Damian Lillard de su equipo de toda la vida fue un fracaso. Las tensiones surgieron tras su solicitud de traspaso el pasado mes de julio, hasta el punto de que se rompió el diálogo entre el jugador y la organización según información de Chris Haynes. Este último compartió numerosos elementos en un artículo de este jueves cuya procedencia está fuera de toda duda.

Efectivamente y para quien no lo sepa, Haynes es muy cercano… a Lillard. No en vano el insider es el primero en revelar las primicias sobre el creador de juego: en su artículo pudimos aprender cosas como, por ejemplo, que Dame estaba dispuesta a quedarse con los Blazers, antes de que la franquicia le pidiera que se fuera. Pero eso no es lo único que genera controversia.

¿Damián Lillard amargado contra los Blazers?

Lillard, oficialmente lesionado al final de la temporada el año pasado, quedó fuera de juego por una lesión en la pantorrilla. Un pretexto falso según los seguidores, simplemente para permitir que Portland aumente sus posibilidades en el draft. Una versión confirmada por Haynes en su artículo, y también podemos deciros que al jugador no le gustó mucho.

Los Blazers dejaron fuera a Lillard durante los últimos 10 juegos de la temporada para permitir que el equipo tuviera una selección más grande en el draft. La señora aceptó a regañadientes y recuperaron una lesión en la pantorrilla.

Les recordamos que dicha práctica está prohibida por la liga. Amargo contra su equipo, podemos preguntarnos si Lillard no quiere que este último sea sancionado por la NBA a través de esta filtración. El hecho es que Dame no estaba contento con tal práctica, lo suficiente como para precipitar su salida de Oregón.

Damian Lillard es un competidor y su prioridad es estar en la cancha tratando de ganar. La decisión de los Blazers de dejarlo de lado fue difícil, incluso si el líder tuvo que vivir con ello. A Enésima razón para empujarlo hacia la salida.